El aceite de palma es un aceite de origen vegetal que encontramos en multitud de productos alimenticios, que a pesar de su uso tan extendido se convierte en una opción poco saludable. Este aceite se produce a partir de los frutos de la palma africana.
Este aceite se encuentra en gran cantidad de productos donde se puede encontrar con distintos nombres como:
– aceite vegetal
– caprílico
– dilinoleico
– esteárico
– mirístico
– ácido palmítico
– ascorbil palmitato
La industria emplea normalmente este tipo de aceite por ser mucho más barato en comparación a otros como el de girasol o el de aceite, y por otra parte presenta un estado más sólido a temperatura ambiente
Su uso es muy extendido, siendo fácil encontrarlo en numerosos productos alimenticios diversos (desde galletas a pasteles, pasando por pizzas precocinadas, cremas de cacao o aperitivos salados).
¿Por qué no es saludable?
Su alto contenido en grasas saturadas (50%) aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares ya que un consumo continuo supone un aumento de grasas saturadas que influyen de forma negativa aumentando el colesterol LDL (colesterol malo) en sangre.