Rosi García llegó al Poniente almeriense con 21 años, junto a su marido, con 22. Ambos decidieron comenzar su vida juntos aquí y hacerlo en el campo. Desde entonces han pasado 35 años, Más de tres décadas en las que han tenido momentos duros, pero también muchos felices. En ese tiempo construyeron su primer invernadero, aprendieron desde la experiencia, fueron padres, formaron una familia, adquirieron más extensión de tierra, pero también vivieron momentos duros en los que el viento se llevó un invernadero y el pedrisco tiró parte de otro al suelo, además de dañar la balsa de riego. Pero como buenos agricultores han sabido siempre reponerse, uno al lado del otro.
«Yo le veo futuro a la agricultura. Es verdad que cada vez está la situación más complicada, por eso necesitamos unión. Desde que hemos entrado en UNICA estamos muy contentos, porque a la hora de vender tienes más fuerza», explica, al tiempo que no duda en demandar una mayor ayuda por parte de los políticos: «nos tienen que defender más».
«Yo soy de las que piensan que hay que innovar constantemente, si no te quedas atrás, y hay que tecnificar porque el rendimiento mejora», señala.
Lee la entrevista completa en el especial de agricultura de diario IDEAL