Los eurodiputados quieren reducir a la mitad las 88 millones de toneladas de comida que cada año acaban en la basura en la UE mediante la eliminación de las restricciones para las donaciones y acabando con la confusión entre las etiquetas de “consumo preferente” y “fecha de caducidad”.
La Cámara pide a los Estados miembros que adopten las medidas necesarias para reducir el desperdicio de alimentos un 30% en 2025, y un 50% en 2030, en comparación con 2014.
Las autoridades nacionales y los operadores del sector alimentario deben hacer más para garantizar que los consumidores entienden la diferencia entre las fechas de caducidad y de consumo preferente, en particular el hecho de que puedan consumir alimentos una vez rebasada la fecha de consumo preferente.
Por otra parte, se pretende facilitar la donación de alimentos proponiendo un cambio en la directiva del IVA autorizando explícitamente la exención de impuestos en las donaciones de alimentos. Asimismo, plantea que el Fondo de Ayuda Europea para los Más Necesitados se utilice para financiar los costes de las infraestructuras de almacenamiento y transporte de los alimentos donados.
En este aspecto, Unica Group promociona el consumo de hortalizas “menos atractivas” que son destruidas, no por su mala calidad o por su sabor, sino simplemente por no cumplir con los cánones establecidos por el mercado, aunque poseen las mismas propiedades nutritivas.