La Navidad se asocia cada vez más con los excesos alimenticios, donde las grasas y los azúcares se convierten en los reyes de la mesa como menús abundantes, acompañados de alimentos muy grasos, salsas y teñidos con el vino y las bebidas azucaradas, sin olvidar los imprescindibles dulces navideños. Ante toda esta avalancha, ¡no olvidéis las frutas y hortalizas!
La Asociación 5 Al Día recuerda que podemos redistribuir las comidas, es decir, si sabemos que por la noche comeremos más excesos, la comida puede ser más ligera, ya sea una ensalada variada y un pescado a la plancha acompañado de hortalizas al vapor.
A veces unas verduras horneadas, hervidas, a la plancha o salteadas pueden ser la mejor opción para acompañar los asados navideños, es decir, llevando una cocina sana y ligera. La decoración e imaginación para tus platos puede ser de gran ayuda, si acompañas las carnes con ensaladas de brotes tiernos, ya sea lechugas variadas, escarola, endibia, rúcula, berros, canónigos, etc. además de añadir colorido y presentación al plato, no lo sobrecargarás de calorías, facilitando así la digestión.